Muchas veces le he preguntado a matrimonios "viejos" por así decirlo, cual era el secreto de la felicidad, como era la formula para llevar tantos años juntos y que el amor perdurara como el primer día; algunos me dijeron que el secreto era "el aguante" siempre en la pareja hay uno con el carácter mas fuerte, otros me decían que su método era el de ceder hasta que su otra mitad también cediera, hubo quien me dijo que los hijos eran la clave de seguir juntos, fueron contadas las veces que escuche decir que seguían juntos porque aun se amaban...
Hay estadísticas que hablan del primer año, del segundo, de los primeros cinco, los primeros diez etc etc. En mi caso particular creo que ya se cual es la base, la suma y la resta que hace a una relación perdurar en el tiempo, si bien es cierto que mi "matrimonio" recién comienza (hace a apenas 4 años que estamos juntos) no fue como dicen las estadísticas que al principio todo es color rosa y maravilloso como en un cuento, por el contrario el primer año fueron mas los días que pasamos enojados sin hablarnos y cuando hablamos era para desatar "una batalla campal" ambos queríamos tener la razón y ambos desde nuestro punto de vista la teníamos; el segundo año no nos fue mejor y hasta llegamos a tener en cuenta una separación aun a pesar de lo mucho que nos amábamos porque llegamos a concluir de que este era un amor nocivo, cada día nos sentíamos mas frustrados y ya no teníamos tema de conversación que no desatara una "guerra"
Fue casi a finales de nuestro tercer año de guerras y sin razones que decidimos una separación definitiva y también fue en ese momento cuando estaba todo perdido que dejamos "las armas" a un costado y como un acuerdo mutuo (sin mediar palabras) dejamos hablar a los "sentimientos", hasta ese momento no habíamos entendido que el amor no es "tener la razón" porque me ama, por primera vez en mucho tiempo estuvimos de acuerdo en algo : no queríamos formar parte de las estadísticas que hablan de la rutina, del engaño, de estar por los hijos o estar por no admitir un fracaso y la verdad era que no habíamos fracasado porque de verdad nos amábamos, el verdadero problema no era la falta de amor, el problema era que no sabíamos que hacer con ese sentimiento que desconocíamos (los dos veníamos de relaciones anteriores bastantes conflictivas y no sabíamos vivir de otra manera)
Si hoy me preguntaran a mi cual es la formula mi respuesta seria : no hay formula, cada pareja es un mundo, lo que si puedo decir como si fuera ciencia exacta es que aprendimos a escucharnos, aprendimos a aceptar las razones del otro sin desatar una guerra y aceptar cuando nos equivocamos sin que eso sea motivo de disputa porque no competimos por ver quien es mejor, vamos por un mismo camino intentando llegar a un mismo destino, vamos a la par uno del otro, mi única formula es ser amada y que me amen y todo por sobre todas las cosas con respeto. Otra de las formas que encontramos de comunicarnos es la de vivir como si fuera la primera vez que nos vemos todos los días, es cierto que no siempre estamos del mejor humor, aprendimos a darnos nuestro espacio para no asfixiar al otro y elegimos vivir cada día como si fuera el primero y el ultimo y como si fuera un eterno noviazgo aunque sin títulos que suenen posesivos ya que los términos de posiciones terminan por encapsular y agobiar, "vivimos juntos no revueltos" "somos un matrimonio no carceleros del otro"
Se que no estoy diciendo nada nuevo en lo que a pareja o matrimonio se refiere, lo lamentable es que en la actualidad los jóvenes se separan a la menor oportunidad sin darse el tiempo o el valor necesarios, en la actualidad las relaciones se construyen como si fueran castillos de naipes...
Autora
Kary Lara
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Kary Lara
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